Tambuscio, Pablo



H

Todas las monstruosidades violan los gestos atroces de Hortensia. Su soledad es la mecánica erótica, su lasitud, la dinámica amorosa. Bajo la mirada vigilante de una in¬fancia ha sido, en épocas numerosas, la ardiente higiene de las razas. Su puerta está abierta a la miseria. Allí, la moralidad de los seres actuales se descorporiza en su pa¬sión o en su acción - ¡Oh terrible escalofrío de los amo¬res novicios sobre el suelo ensangrentado y por el hidró¬geno claridoso! Encontrad a Hortensia.